Ida de las semifinales de la Liga de Campeones, con los enfrentamientos entre el Manchester City - Real Madrid y el Atlético de Madrid - Bayern de Múnich.
Primeramente el equipo dirigido por Zidane, el cual sorprendían con la baja de Cristiano Ronaldo, que no se recuperó a tiempo de las molestias que le hicieron perderse también el encuentro ante el Rayo en Liga.
Comienzo del partido con intensidad por ambos equipos, con el control del City ante una fuerte presión del Madrid, que buscaba robar y salir a la contra.
Ambos equipos se estaban respetando sobre el césped, ninguno quería dar ningún mal pase que aprovechase el rival. Cuando el balón no lo tenían los locales, la tocaba y tocaba los blancos, mientras se defendían los ingleses y viceversa.
Hubo un tramo de ocasiones a balón parado por parte de los locales, que acababan sin peligro alguno para los blancos, que estos a su vez iban terminar la primera parte mucho mejor que su rival, pues pasa la media hora de juego, uno de los mejores de los ingleses, David Silva, abandonaba el terreno de juego lesionado, dejando así a su equipo sin muchas ideas sobre el campo.
Hubo un tramo de ocasiones a balón parado por parte de los locales, que acababan sin peligro alguno para los blancos, que estos a su vez iban terminar la primera parte mucho mejor que su rival, pues pasa la media hora de juego, uno de los mejores de los ingleses, David Silva, abandonaba el terreno de juego lesionado, dejando así a su equipo sin muchas ideas sobre el campo.
Comienzo de la segunda parte y el Kun Agüero avisaba en el primer minuto de juego, con un zurdazo desde fuera del área que se iba alto.
A los siete minutos era Sergio Ramos para el Madrid, cabezazo tras un saque de esquina, que va directamente a las manos del meta Joe Hart.
Pasaban los minutos y sin ocasiones claras para ningunos, hasta que se llegó los últimos veinte minutos de partido. Jesé Rodríguez, que había sustituido en el descanso a Benzema, mandaba de cabeza el esférico al larguero. Empezaba ahora sí el acoso de los blancos, que la volvieron a tener poco después en un saque de esquina, cabezazo de Casemiro que con buenos reflejos el meta saca con el pie.
Nuevo córner y parada de Hart en una clarísima ocasión de Pepe, que estando totalmente solo, la estampa a quemarropa contra el portero.
Lo que fallaba Pepe en ataque, lo defendía bien atrás, pues salvaba lo que hubiese sido un mano a mano de Sterling contra Keylor Navas, que más tarde el meta tico sacaba la mano en un buen lanzamiento de falta de Kevin De Bruyne.
Finalmente empate a cero, donde los de Zidane perdonaron en la segunda mitad el haber sentenciado ya la eliminatoria. Queda todo abierto así pues para la vuelta de la próxima semana en el Santiago Bernabéu, donde ahora sí el Real Madrid está obligado a ganar el partido si quiere estar en la final de Milán.
Pasaban los minutos y sin ocasiones claras para ningunos, hasta que se llegó los últimos veinte minutos de partido. Jesé Rodríguez, que había sustituido en el descanso a Benzema, mandaba de cabeza el esférico al larguero. Empezaba ahora sí el acoso de los blancos, que la volvieron a tener poco después en un saque de esquina, cabezazo de Casemiro que con buenos reflejos el meta saca con el pie.
Nuevo córner y parada de Hart en una clarísima ocasión de Pepe, que estando totalmente solo, la estampa a quemarropa contra el portero.
Lo que fallaba Pepe en ataque, lo defendía bien atrás, pues salvaba lo que hubiese sido un mano a mano de Sterling contra Keylor Navas, que más tarde el meta tico sacaba la mano en un buen lanzamiento de falta de Kevin De Bruyne.
Finalmente empate a cero, donde los de Zidane perdonaron en la segunda mitad el haber sentenciado ya la eliminatoria. Queda todo abierto así pues para la vuelta de la próxima semana en el Santiago Bernabéu, donde ahora sí el Real Madrid está obligado a ganar el partido si quiere estar en la final de Milán.
Al día siguiente era el turno de los del Cholo Simeone, que recibían la visita del Bayern de Múnich en el Vicente Calderón.
Comienzo vibrante de los colchoneros, que no dejaban respirar a los alemanes con su presión. Saúl lo intentaba a los tres minutos con un disparo desde la frontal, fácil para el meta Manuel Neuer.
Luego Fernando Torres con chut raso y a la tercera fue la vencida, arrancada desde el medio campo de Saúl Ñíguez, que dribla a cuanto se le pone delante y finaliza con un disparo cruzado que bate a Neuer, golazo de lo rojiblancos para ponerse por delante en el partido y lo que más tarde iba ha suceder, en la eliminatoria.
En la siguiente, Giménez sacaba sobre la línea de gol el remate de cabeza de Arturo Vidal, que hubiese supuesto el empate. Volvían a tener otra los alemanes, lanzamiento de falta con rosca de Douglas Costa, que se estrella en el lateral de la red. Luego Antoine Griezmann iba a perdonar el segundo de los suyos en un mano a mano con el meta alemán.
Se igualaban las fuerzas y empezaba ahora sí a controlar el balón los visitantes, pero el buen conjunto del Atleti no le ponía las cosas nada fácil.
Comienzo de la segunda mitad con el Bayern yendo a por todas a por el empate, con un asedio brutal sobre la meta de Oblak. David Alaba estrellaba el balón en el larguero, tras un tremendo disparo desde más de treinta metros. Luego Oblak detenía sobre la línea, un peligroso remate de cabeza de Javi Martínez.
Sufría el Atleti ante la insistencia rival, achicando aguas en su área. Guardiola metía más carne en el asador con Thomas Müller y Franck Ribery. Douglas Costa mandaba el balón por encima del larguero en una contra. Luego Oblak despejaba con los puños un disparo de Arturo Vidal.
Llegaba después una doble ocasión local, contraataque que el 'Niño' Torres, tras internarse en área y regatear a Alaba, estrella el balón al poste, el rechace lo coge Koke y su disparo lo saca Neuer.
Continuó el Bayern buscando el empate a la desesperada en los últimos minutos pero ya no se volvería a mover más el marcador.
Final y grandísimo resultado para el Atlético de Madrid, que gana el primer partido de semis y no encaja ningún tanto. Ahora les queda un último empujón para volver a disfrutar de una final de Champions, aunque nunca hay que dar por muerto al Bayern de Múnich y menos en su Allianz Arena, donde muy probablemente el equipo madrileño sufrirá como lo ha sufrido hoy, pero donde un empate les valdría para alcanzar la soñada final.
Luego Fernando Torres con chut raso y a la tercera fue la vencida, arrancada desde el medio campo de Saúl Ñíguez, que dribla a cuanto se le pone delante y finaliza con un disparo cruzado que bate a Neuer, golazo de lo rojiblancos para ponerse por delante en el partido y lo que más tarde iba ha suceder, en la eliminatoria.
En la siguiente, Giménez sacaba sobre la línea de gol el remate de cabeza de Arturo Vidal, que hubiese supuesto el empate. Volvían a tener otra los alemanes, lanzamiento de falta con rosca de Douglas Costa, que se estrella en el lateral de la red. Luego Antoine Griezmann iba a perdonar el segundo de los suyos en un mano a mano con el meta alemán.
Se igualaban las fuerzas y empezaba ahora sí a controlar el balón los visitantes, pero el buen conjunto del Atleti no le ponía las cosas nada fácil.
Comienzo de la segunda mitad con el Bayern yendo a por todas a por el empate, con un asedio brutal sobre la meta de Oblak. David Alaba estrellaba el balón en el larguero, tras un tremendo disparo desde más de treinta metros. Luego Oblak detenía sobre la línea, un peligroso remate de cabeza de Javi Martínez.
Sufría el Atleti ante la insistencia rival, achicando aguas en su área. Guardiola metía más carne en el asador con Thomas Müller y Franck Ribery. Douglas Costa mandaba el balón por encima del larguero en una contra. Luego Oblak despejaba con los puños un disparo de Arturo Vidal.
Llegaba después una doble ocasión local, contraataque que el 'Niño' Torres, tras internarse en área y regatear a Alaba, estrella el balón al poste, el rechace lo coge Koke y su disparo lo saca Neuer.
Continuó el Bayern buscando el empate a la desesperada en los últimos minutos pero ya no se volvería a mover más el marcador.
Final y grandísimo resultado para el Atlético de Madrid, que gana el primer partido de semis y no encaja ningún tanto. Ahora les queda un último empujón para volver a disfrutar de una final de Champions, aunque nunca hay que dar por muerto al Bayern de Múnich y menos en su Allianz Arena, donde muy probablemente el equipo madrileño sufrirá como lo ha sufrido hoy, pero donde un empate les valdría para alcanzar la soñada final.
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